Lima, 16 de junio de 2009.- Un océano de gente. La Marcha “Por la Paz y la Democracia”, convocada por el Partido Aprista Peruana, fue un éxito total. Algunos más elocuentes la califican de Apoteósica. Y es el partido de gobierno demostró así su poder de convocatoria, en respuesta a la marcha que convocaron distintos gremios sindicales en rechazo a los decretos legislativos 1090 y 1064, referidos a la Ley Forestal y de Fauna Silvestre.
La marea estuvo picada desde la Casa del Pueblo hasta el Congreso de la República. La movilización de los manifestantes ocupó durante todo el recorrido aproximadamente cuarenta cuadras, tal y como lo pueden testimoniar las cámaras de televisión que reportaban en directo.
Las arengas se multiplicaron a lo largo de ese serpetín de banderolas que recorrió la avenida Alfonso Ugarte, primero, Colmena, enseguida, Abancay, finalmente. “El APRA defiende a su gobierno en las calles”, “Democracia sí, terrorismo no”, “Víctor Raúl, presente!”, “Alan, amigo, el Pueblo está contigo” o “El pueblo no se rinde, carajo”.
La bocinas tiñeron de bullicio la Lima monumental. Dos mil simpatizantes los acompañaban en su clamor. Los congresistas de la República sostuvieron durante todo el recorrido una bandera peruana. Allí estaban. Mauricio Mulder, secretario general del APRA, encabezó la manifestación, junto con Luis Gonzales Posada. Más allá, Aurelio Pastor, César Zumaeta y Wilder Calderón lideraban la marcha, precedida por una enorme bandera peruana. Sus voces se confundían con las del pueblo, ávido de la paz y democracia heredada de Haya de la Torre y los mártires de la agrupación de la estrella de cinco aristas. Se sumó a la movilización la Confederación de Trabajadores del Perú (CTP).
El fuerte cordón policial, apostado sobre el jirón Huallaga, frenó la embestida pacífica del contingente de personas que se acercaban a la sede del Legislativo. Empero, lo que no pudo detener es el ansia de un pueblo castigado por el flagelo del narcoterrorismo. Y así lo dio a conocer Mauricio Mulder, quien reiteró que la marcha buscaba manifestar el apoyo ciudadano a la paz y a la democracia.
Consultado sobre esta demostración de unidad aprista y respaldo al gobierno del presidente Alan García Pérez, el legislador por Áncash, Wilder Calderón Castro, se pronunció sobre la marcha. “Esta es la respuesta del pueblo a la infamia digitada desde el sillón presidencial llanero, a la calumnia antisistema del APRA quiere vender la selva a las transnacionales, a la barbarie perpetrada contra 23 policías torturados y asesinados, a la instigación homicida”, calificó.
Mauricio Mulder, por su parte, reiteró que la marcha buscaba manifestar el apoyo ciudadano a la paz y a la democracia. “Repudiamos la violencia en Bagua y nos solidarizamos con los pueblos amazónicos por lo ocurrido”.
Lima, 16 de junio de 2009.- Un océano de gente. La Marcha “Por la Paz y la Democracia”, convocada por el Partido Aprista Peruana, fue un éxito total. Algunos más elocuentes la califican de Apoteósica. Y es el partido de gobierno demostró así su poder de convocatoria, en respuesta a la marcha que convocaron distintos gremios sindicales en rechazo a los decretos legislativos 1090 y 1064, referidos a la Ley Forestal y de Fauna Silvestre.
La bocinas tiñeron de bullicio la Lima monumental. Dos mil simpatizantes los acompañaban en su clamor. Los congresistas de la República sostuvieron durante todo el recorrido una bandera peruana. Allí estaban. Mauricio Mulder, secretario general del APRA, encabezó la manifestación, junto con Luis Gonzales Posada. Más allá, Aurelio Pastor, César Zumaeta y Wilder Calderón lideraban la marcha, precedida por una enorme bandera peruana. Sus voces se confundían con las del pueblo, ávido de la paz y democracia heredada de Haya de la Torre y los mártires de la agrupación de la estrella de cinco aristas. Se sumó a la movilización la Confederación de Trabajadores del Perú (CTP).
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